Época: civilización minoica
Inicio: Año 2000 A. C.
Fin: Año 1450 D.C.

Antecedente:
Arquitectura

(C) Jacobo Storch de Gracia



Comentario

En todo el período del esplendor minoico, los enterramientos son de múltiples tipos; se mantienen usos funerarios del período prepalacial (tumbas excavadas en la roca, en cámaras funerarias de reducido tamaño, tales como las de Palaikastro, Gurniá o Vasiliki, pudiendo haber en ellas tumbas de cista, en una caja de cerámica o lárnax y de jarra o pithos) junto a novedades aparecidas con los primeros palacios. Estas novedades son de dos tipos: el nacimiento de la tumba en tholos (cámara abovedada por medio de aproximación de hiladas, como la de Arjánes o de Kefala, cerca de Cnosós, verdaderos precedentes de los thóloi micénicos) y la tumba-edificio, de forma rectangular y con diversas habitaciones, al modo de una vivienda. Estos tipos de tumba pervivieron todo el Minoico Medio y Reciente; la forma más común en el período de los Nuevos Palacios es la descrita en último lugar, un complejo de habitaciones donde se deposita un rico ajuar junto al enterramiento. Una de las estancias hace las veces de santuario, con un altar y cuernos de consagración, además de pinturas murales en algún caso. De esta forma fue la conocida tumba real de Isópata, excavada por Evans en Cnosós y destruida posteriormente, o la llamada tumba-templo, también en las cercanías de este palacio y visitable hoy día. En ésta, un edificio religioso precede a todo el conjunto y da acceso a un patio abierto y pavimentado, al fondo del cual se abre una cripta cuyo techo es sostenido por dos pilares y la cámara sepulcral. Sobre la cripta, una habitación con columnas fue empleada como lugar de culto. En los momentos finales de la cultura minoica los enterramientos se realizaban en tumbas anteriores reutilizadas o construidas siguiendo la misma forma, con los cuerpos colocados en lárnakes, sarcófagos rectangulares con patas y tapadera, cuya pieza maestra es el sarcófago pintado de Hagia Triada, o en forma de bañera, hechas de terracota y también decoradas con pintura, muchas de ellas correspondientes ya a la etapa de dominio micénico en la isla de Creta.